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LIBRO DE ABDÍAS

Índice

PROFECÍA DE ABDIAS, EL PROFETA DE EDOM

Libro de Abdías, profecía 

No existe prueba en las escrituras de cuándo profetizó Abdías. Sin embargo, su profecía fue muy similar a la de Jeremías en cuanto a Edom (Jeremías 49:7-22). Es posible e igualmente probable, que profetizara durante el período de Jeremías. Pudo haber sido justo antes o después de la caída de Jerusalén.

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Los edomitas, a quienes estuvo dirigida la profecía de Abdías, eran descendientes de Esaú. Ellos habitaban el territorio rocoso y montañoso al sur del Mar Muerto. Sela (Petra), su capital, estaba situada muy dentro de los desfiladeros de las montañas, en un risco (peña) perpendicular.

Ellos consideraban esto como una plaza fuerte e inexpugnable, en la que se podían refugiar después de sus incursiones y correrías. Era un pueblo orgulloso, amargo y resentido. Su odio hacia los israelitas se derivó del tiempo de los problemas entre Esaú y Jacob.

Libro de Abdías capítulo I: Castigo y Destrucción de Edom

El primer versículo de la profecía de Abdías es casi idéntica a la de Jeremías 49:14. El dijo que Dios agitaría a las naciones contra los edomitas para castigarlos por sus pecados contra Judá. Dios hizo a Edom pequeño, en comparación con las demás naciones, quizás en respeto y reconocimiento, así como en número. 

Su orgullo se les había engañado en su sentimiento de seguridad en las hendiduras de las peñas e igualmente en su sentimiento de auto-importancia ante las demás naciones. Estaban muy orgullosos de su sabiduría, pero Dios dijo que sus hombres sabios serían destruidos.

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Tanto Abdías como Jeremías profetizaron que si los ladrones vinieran, seguramente ellos dejarían algo. Y si llegaran vendimiadores, ellos dejarían algún rebusco, pero Dios iba a aniquilar a Edom (versículos 5-9; Jeremías 49:9, 10).

Dios, a través de Abdías, les reprochó su violencia contra Judá su hermano. Esaú, el antepasado de Edom, y Jacob, el antepasado de Israel, eran hermanos gemelos. Cuando Nabucodonosor destruyó a Jerusalén, los edomitas se regocijaron de la caída de Judá y participaron en la cruel masacre y saqueo

Los edomitas se pararon en las encrucijadas de las carreteras para capturar y entregar a Nabucodonosor los judíos que trataban de escapar. Abdías prometió la completa extinción de Edom por esos pecados (versículos 10-14).

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Dios usó la maldad de las naciones paganas para castigar a Israel y a Judá por sus pecados de seguir los medios de idolatría de los paganos. Mediante ellos, trató de hacerlos regresar a él, el único Dios verdadero y Salvador. Pero después castigó a los paganos, quienes continuaron en sus iniquidades, con completa destrucción (versículos 15, 16). 

Poco tiempo después que Edom ayudó a Nabucodonosor a destruir a Judá, Dios utilizó a Nabucodonosor para derrotar a los edomitas y sacarlos de fortalezas en las montañas, de cuyo lugar Dios dijo que él los derribaría (versículo 4).

Destrucción de Edom, Restauración de Sion y todo Israel

Abdías, después de profetizar la destrucción de Edom, profetizó la restauración espiritual de Sion y de todo Israel (la casa de Jacob). El dijo que Dios haría de la casa de Jacob fuego, y la casa de José llama, para devorar la casa de Esaú hasta que no quedara nada

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Antes del tiempo de Cristo, Edom había sido conquistado completamente por los judíos (los Macabeos)y absorbido por el estado judío.Los Herodes, quienes habían sido nombrados gobernantes en Palestina por el gobierno romano, eran edomitas. Después de la destrucción de Jerusalén en el 70 A.C. por el general romano Tito, ellos desaparecieron de la historia, cumpliéndose la profecía.

La última profecía de Abdías fue sobre la restauración espiritual completa de Israel y el reino de Cristo sobre la tierra por mil años.

Otras escrituras que predijeron la destrucción de Edom: Salmo 137:1-7; Isaías 34:5-15; Jeremías 49:7-22; Ezequiel 25:12-14; 35:1-15; Amós 1:11, 12.

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